Irak, y en especial, los pueblos cristianos de la Llanura de Nínive, recobran su dinamismo y actividad con el retorno de más de 8.800 familias
El 35,15% de las propiedades ya han sido restauradas gracias al proyecto de reconstrucción que apoya Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Tras la derrota de Daesh en 2016, el regreso de los sacerdotes y religiosos, los cristianos desplazados por la guerra, comenzaron a volver a su tierra. Esta vuelta ha sido, y está siendo posible, gracias al proyecto de reconstrucción de la Llanura de Nínive que apoya Ayuda a la Iglesia Necesitada. Irak, y en especial, los pueblos cristianos de la Llanura de Nínive, recobran su dinamismo y actividad con el retorno de más de 8.800 familias.
Más de 39.900 cristianos pueden ver y ayudar a reedificar sus casas. Otros ya disfrutan de un nuevo esplendor que ha sido devuelto a sus viviendas. Son 568 las que hasta ahora han sido restauradas completamente.
Lo que comenzó frágil como un olivo joven, la reconstrucción, es ahora un gran proceso que da sus frutos. 4.765 propiedades restauradas en los pueblos de Bartella, Karamles y Qaraqosh. Casas, templos y otros edificios de la Iglesia recuperados en su totalidad porque “no se puede concebir un Oriente Medio sin cristianos”, como dijo el Nuncio de Irak y Jordania, Mons. Alberto Ortega.
Con la invasión de Daesh 1.234 casas fueron destruidas, 3.155 quemadas, 13.555 dañadas y 9.166 sufrieron deterioros parciales. La Llanura de Nínive quedó desolada, sin vida. Estas circunstancias unieron, por primera vez a líderes de la Iglesia Caldea, Católica Siria, Ortodoxa Siria, con el propósito de devolver la presencia cristiana a esta región. Fue así como surgió el Comité de reconstrucción por el que el 44,63% de las familias cristianas han regresado a Irak.