Durante mucho tiempo se nos ha reprochado a los cristianos la desvinculación de este mundo, motivada –según estas voces– por nuestra esperanza en la vida eterna. Monseñor Antonio Ceballos, obispo de Cádiz y Ceuta, dice, en su carta escrita con motivo del Adviento, que el marxismo acusó a los cristianos de «que una espera muy viva del Señor había de hacernos muy despreocupados por los asuntos de nuestro mundo», pero explica que se trataba de una acusación falsa, porque, «para el cristiano, el tie...