La publicidad, además de vender productos, puede promocionar ideas que nos ayuden a ser mejores
Mi lema preferido es éste: "Si la publicidad no sirve para iluminar, no sirve para nada". Por eso publico cada semana un spot que reúna estas tres condiciones: 1) Que haga pensar; 2) Que aporte luz y optimismo; 3) Que muestre que los anuncios pueden inspirarnos y hacernos mejores.
El vídeo que hoy he seleccionado es un spot de Coca Cola titulado “Reconciliación”, y fue creado por la agencia madrileña McCann Erickson hace ya tiempo. Por su acertada creatividad, mereció ese año el Gran Premio de Oro concedido por AMPE (Asociación de Medios Publicitarios de España) y el Premio al Mejor Spot del año concedido por la APPE (Asociación de Productores de Publicidad Española).
Es un anuncio muy sencillo, pero con una fuerte carga emotiva. Por una parte, nos habla de algunas cosas que dificultan la comunicación en la pareja: utilizar a los hijos como parapeto o como arma arrojadiza; suponer que una respuesta evasiva pretendía humillarnos o hacernos daño; generalizar a partir de un acto concreto como si fuera un defecto del otro imposible de corregir...
En un determinado momento, el chico que actúa de mensajero tiene una feliz inspiración. Y el anuncio empieza a hablarnos de otras cosas, mucho más positivas, y que todos deberíamos tratar de conseguir: olvidar con una sonrisa una palabra amarga, descubrir lo bueno del otro que habíamos ya olvidado, transformar los dardos encendidos en bellas palabras de perdón. Pero, aún más que eso, el anuncio nos habla de esos laberintos en que a veces nos encerramos, haciendo imposible toda comunicación con el exterior.
Hoy, que asistimos al drama de tantas familias rotas, viene bien descubrir que la publicidad, además de vender productos, puede promocionar ideas que nos ayuden a ser mejores.