Un nuevo milagro atribuido a la intercesión de Juan Pablo II podría haber sido incluido en el sumario del proceso de beatificación del difunto Papa.
Un nuevo milagro atribuido a la intercesión de Juan Pablo II podría haber sido incluido en el sumario del proceso de beatificación del difunto Papa. Al menos así lo aseguró, en su edición de ayer, uno de los principales diarios polacos, la «Gazeta Wyborcza», que dio por hecho que el comité que se encarga de analizar estos casos estudia ya la historia de una niña nacida prematuramente.
El bebé vino al mundo en julio de 2005 en la localidad de Czestochowa -lugar de peregrinación mariano especialmente querido por Juan Pablo II- y sobrevivió contra todos los pronósticos médicos. La fecha de nacimiento de la niña, identificada como Gloria Wrona, coincide además con el inicio del proceso de beatificación del Papa polaco. Los médicos del hospital estaban convencidos de que la niña no sobreviviría, ya que su madre dio a luz antes de que el feto formase los principales órganos vitales, a causa de las complicaciones surgidas durante el embarazo. Tanto era así, que los doctores decidieron dar a los padres la mala noticia incluso antes de practicar la cesárea.
Sin embargo, Gloria siguió adelante: a pesar de sus 37 centímetros de altura, de sus escasos 860 gramos de peso, de unos riñones que no funcionaban y de una grave carencia cardiaca. Los padres, al igual que los doctores, están convencidos de que se trata de una situación «milagrosa».
Joana y Jacek Wrona, progenitores de la niña, son creyentes practicantes. «En esos días horribles pedí fuerzas a Nuestra Señora para aceptarlo todo», dijo Joana a la Prensa polaca, en unas declaraciones recogidas por la agencia alemana Dpa. «Tenía la despedida de Juan Pablo II fresca en la memoria y le recé también a él, convencida de que ahora está cerca de Dios y como santo puede lograr mucho», agregó.
Al segundo día de vida, Gloria comenzó a experimentar lo que sus padres consideran un milagro: el riñón, apenas formado, empezó a funcionar; el corazón latió y la grave carencia cardíaca desapareció de una manera inexplicable. Pasaron 29 días y su cuadro clínico se estabilizó. Hoy la niña está completamente sana. El padre, Jacek Wrona, editó por sus propios medios un libro en el que explica la historia y envió un ejemplar del mismo a la comisión del Vaticano competente para el proceso de beatificación de Juan Pablo II. Según el diario polaco, la familia Wrona acaban de recibir la noticia de que el caso de Gloria será incluido como testimonio de milagro en la causa.
El proceso, que cuenta con otro eventual milagro (el de una monja francesa que sanó de parkinson), podría cerrarse antes del segundo aniversario de la muerte de Juan Pablo II el 2 de abril, según explicó el postulador en una reciente entrevista con LA RAZÓN.
En cualquier lugar, el caso aún no ha sido confirmado por la comisión postuladora y cabe la posibilidad de que se trate de un malentendido por parte de la familia, ya que el Vaticano responde y comenta algunos de los casos anunciados, y ello no significa forzosamente que lo consideren un milagro «aprovechable» para una causa de beatificación.