El bautizo fue cuatro días después de nacer -el 9 de enero de 1902- en la Catedral de Barbastro, su ciudad.
Ese día se le borró el pecado original y comenzó a ser hijo de Dios.
Le pusieron los nombres de José, María, Julián y Mariano. Años más tarde él mismo unió los dos primeros nombres en el de Josemaría. Quería manifestar así su gran amor a la Santísima Virgen y San José.
La pila donde lo bautizaron está ahora en Roma en la iglesia Santa María de la Paz. Muchas veces el Beato Josemaría la besaba con devoción cuando pasaba por allí y decía: - aquí me hicieron cristiano.
Carmen estaba muy contenta de tener un hermanito. Luego nacieron Chon, María Dolores y María del Rosario. El pequeño crece rodeado del cariño de sus padres, sano, fuerte y feliz. Sin embargo, cuando tenía sólo dos años se puso muy grave y el médico dijo a don José Escrivá: - mira, Pepe, creo que de esta noche no pasa.