Dirección: David Dobkin
Intérpretes: Vince Vaughn, Paul Giamatti, John Michael Higgins, Miranda Richardson, Rachel Weisz, Kathy Bates, Kevin Spacey, Elizabeth Banks.
Guión: Dan Fogelman
Música: Christophe Beck
Fotografía: Remi Adefarasin
Distribuye en Cine: Warner
Duración: 116 min.
Género: Comedia, Fantástico
Viaje al Polo Norte
Simpática comedia navideña, apta para toda la familia, cuya mayor originalidad es haber inventado un supuesto hermano mayor de Santa Claus, el malhumorado Frederick, que vive en plena ciudad de Nueva York y no quiere ni oír hablar de su familia.
La causa de esa separación es una mezcla de recuerdos infantiles aciagos Nick (luego Santa Claus) era idolatrado por su madre y Fred cada vez más olvidado; uno lo hacía todo bien para sus padres y el otro era invitado perpetuamente a imitarle; alguna torpeza de Nick que Fred no ha podido olvidar, etc. junto con un poco de desfachatez y pereza por perdonar y superar las pataletas de la infancia.
De todas maneras, Fred cae bien al espectador, porque seguro que cualquiera hubiera sentido lo mismo en su situación. Ahora en plena vida urbana, sigue siendo un vividorcillo de tres al cuarto, aunque de buen corazón, que da largas a su novia y no se compromete por falta de madurez.
Sin embargo, ante la necesidad de conseguir 50.000 dólares para montar un negocio lucrativo, decide humillarse y llamar a su hermano Santa Claus al Polo Norte. El bonachón de Santa le promete el dinero a condición de que vaya a visitarle y trabaje con él unos días, hasta la fecha límite para cerrar el negocio.
El filme de David Dobkin (De boda en boda) sigue en todo momento las pautas del subgénero navideño, con risas y momentos emotivos, entregados con los ingredientes típicos de la comedia familiar: los hermanos desunidos, las dificultades entre enamorados, el malo que intenta acabar con Santa Claus, el amor por todos los niños del mundo, etc. Al final triunfará el amor y cada uno se volverá mejor persona.
Todo muy clásico y navideño, si no fuera por el extraño empeño que parecen tener los guionistas (al menos en la versión española) de eliminar cualquier mención a Dios por pequeña que sea, pues incluso dejan a medias un refrán popular para no citarlo: A quien madruga
, y ahí se quedan. Pero, en fin, es sólo una apreciación singular y anecdótica sobre una película amable y plagada de buenos sentimientos.
Y entre medias hay tiempo para algunas divertidas escenas, como la de la macrodiscoteca que monta Fred en la fábrica de juguetes, o, sobre todo, la de la terapia grupal formada por los hermanos de los famosos (con apariciones estelares de personajes reales, como Frank Stallone, hermano de Sylvester; Roger Clinton, hermano del ex presidente Bill; y Stephen Baldwin, el hermano del también actor Alec).
Aparte de la eficaz interpretación de Vince Vaughn, sorprende el espléndido plantel de secundarios aunque algunos están muy desaprovechados, entre los que destacan un enormemente gordo Paul Giamatti, en el papel de Santa Claus, y Kevin Spacey en uno de esos papeles de malvado que tanto le gustan.
¿Su inconveniente? una "navidad" en la que Dios no aparece por ningún sitio. No merece la pena verla. (decine21 / Almudí JD-AG)