Dirección: Gérald Hustache-Mathieu
Intérpretes: Sophie Quinton, Miou-Miou, Nicolas Duvauchelle, Clément Sibony, Richaud Valls, Geneviève Casile, Monique Melinand.
Guión: Gérald Hustache-Mathieu
Fotografía: Jean-Claude Lother
Distribuye en Cine: Sagrera
Duración: 95 min.
Género: Comedia, Drama
En busca del hermano
Avril es una joven novicia de un convento trapense escondido en las montañas francesas. Está a punto de realizar los votos perpetuos, pero al enterarse de que tiene un hermano gemelo en algún lugar de la Camarga, junto al Mediterráneo, decide escaparse de su encierro e ir en su busca. Para realizar su propósito le acompaña un joven solícito que encuentra por el camino.
El francés Gérald Hustache-Mathieu, que debuta en el largometraje, concibe un planteamiento impecable, de argumento atractivo y estética preciosista. Pero, ante el estupor del espectador, a medida que la historia se despliega se empeña sorprendentemente en destruirlo, llevando su guión hacia derroteros desconcertantes, hasta rozar el ridículo.
Así, mientras Dios desaparece de la escena como por arte de magia, el hábito de la novicia y cualquier otro ropaje acaba haciendo idem en menos que canta un gallo, hasta que al final toda cordura es abandonada (lo que sucede en la capilla es surrealista hasta lo enfermizo).
Además, a partir del dramático secreto que rodea la vida de Avril, Hustache-Mathieu se empeña, al menos eso parece, en enfangar la entrega religiosa de las monjas (¿hay alguna normal?), y hasta bastan unos pocos días para llevar a su joven personaje luminosa la interpretación de Sophie Quinton, sin duda lo mejor del film- hacia una especie de paganismo a la francesa, todo muy naturalista y feliz, absolutamente inverosímil. Una pena, porque la cosa prometía enjundia. (decine21 / Almudí JD-JM)