El prelado del Opus Dei celebró la eucaristía en el Campus Bio-Medico de Roma el pasado 22 de noviembre, con ocasión de la inauguración del año académico
«Allí donde está el Espíritu Santo, donde se le acoge, crece la vida. Él quiere vivir entre nosotros; quiere hacer del Campus una comunidad cada vez más unida, un lugar donde se aprende a combinar profesionalidad con el afecto sincero por las personas».
Con estas palabras, Mons. Fernando Ocáriz, prelado del Opus Dei, se dirigió a estudiantes y profesores de la Universidad Campus Bio-Medico de Roma, con ocasión de la inauguración del año académico 2017/2018. El Campus nació por iniciativa del beato Álvaro del Portillo hace casi 25 años.
El prelado subrayó durante su homilía el espíritu con el que nació el policlínico universitario, citando unas palabras del beato Álvaro, quien en la misa de inauguración del centro académico manifestó el deseo de que “la doctrina y el amor a Cristo orienten e informen más profundamente el ejercicio de las tan nobles profesiones de la medicina y la enfermería. Sin la guía y el empuje de esta doctrina y de este amor −continuó don Álvaro− estos trabajos se convierten en técnicas, frías y sin horizonte, que en vez de servir al bien de los hombres, pueden convertirse en realidades contrarias a la vida y a la dignidad del hombre”.
Entre las diversas iniciativas sociales promovidas por el Campus, destaca una para promover la alfabetización nutricional en Tanzania
Entre las diversas iniciativas sociales promovidas por el Ateneo recientemente, destacan un proyecto conjunto desarrollado con la Universidad de Parma y con dos universidades africanas para favorecer la alfabetización nutricional en Tanzania.
«Todo lo que se hace en el Campus −afirmó Mons. Ocáriz− puede ayudar a devolver la esperanza y a dar motivos para el optimismo a las personas. Hace falta profesores que sean verdaderos maestros, sabios y dedicados a los estudiantes y a los pacientes. Hacen falta alumnos que se apliquen con pasión al estudio para formarse y así poder servir mejor a la sociedad. Sirve personal administrativo, en todos los niveles, que cumpla el propio deber con alegría, consciente de que contribuye con su trabajo al bien del conjunto».
"Os animo a trabajar con espíritu de unidad y de comprensión, con optimismo; sólo así superaréis los obstáculos con la ayuda de Dios" (Beato Álvaro del Portillo)
«En este sentido −continuó−, querría recordar otro consejo del beato Álvaro. Consciente de las dificultades que una iniciativa de este tipo suele afrontar, especialmente en los inicios, afirmaba: “Os animo a trabajar con espíritu de unidad y de comprensión, con optimismo; sólo así superaréis los obstáculos con la ayuda de Dios, seréis felices y −lo que es más importante− os santificaréis y ayudaréis a otros a santificarse, porque estaréis practicando el mandamiento de la caridad”».
Al finalizar la misa, comenzó el acto académico en el Aula Magna. Intervinieron la ministro de Sanidad, Beatrice Lorenzin; el presidente de la región del Lazio, Nicola Zingaretti; el rector, Raffaele Calabró; el presidente de la Universidad Campus Bio-medico, Felice Barela; Giorgio Minotti, director del departamento de Medicina y Cirugía; así como la representante de los estudiantes, Cristina Madaudo.