“Educamos a nuestros hijos para Disney World y cuando llegan a la vida real se encuentran con The Walking Dead”
“El móvil es el sonajero del siglo XXI”, afirmó el pasado viernes 10 de noviembre, en la Universidad de Navarra Pedro García Aguado. El conocido campeón olímpico de waterpolo y presentador de televisión participó, junto con el profesor Francisco Castaño, en una sesión dirigida a orientadores de colegios y responsables de bachillerato de colegios e institutos de Navarra.
“Damos móviles a los niños cada vez más pronto y encima pretendemos que se autorregulen ellos mismos”, apuntó el presentador de programas como Hermano Mayor, Cazadores de Trolls y La isla. Asimismo, recordó, ante la cada vez mayor presencia de las nuevas tecnologías en la vida de los menores, que “ante el derecho a la intimidad prevalece la obligación de protección”.
Pedro García Aguado y Francisco Castaño, responsables del proyecto aprenderaeducar.org, y autores de los libros Aprender a educar, Aprender a educar 2 y A salvo en la red, subrayaron que “los hijos tienen unas obligaciones con la vida familiar que casi siempre son desconocidas como son la de obedecer, respetar y ayudar a liberar las cargas del hogar según sus posibilidades”.
“Educamos a nuestros hijos para Disney World y cuando llegan a la vida real se encuentran con The Walking Dead”, aseguró Francisco Castaño, profesor de secundaria y experto en temas de educación, fracaso escolar y trastornos de conducta. Destacó, además, la importancia de educar en un amor responsable, en el que se enseñe a gestionar la frustración y que conseguir los objetivos cuesta porque si no “se cae en el amor irresponsable, en el que los padres meten al hijo en una burbuja para evitar que nada malo les pase”.
El peligro de la sobreprotección
En este sentido, García Aguado recalcó que la sobreprotección de los hijos es el error más común que cometen los padres: “Creemos que nuestros hijos son de cristal, pero se tienen que tropezar y caer mil veces, porque si no, más adelante, cuando de verdad se rompen, puede ser tarde”.
El objetivo de su proyecto “Aprender a educar” es ayudar a los padres a educar y guiar a sus hijos en valores positivos y sanos. “Hay que querer y hay que educar al hijo que tienes, no al que te gustaría tener”, señaló Francisco Castaño. En su opinión, “aunque a día de hoy los valores se han ido adaptando a los nuevos ritmos de inmediatez, el respeto, el esfuerzo, la constancia y la humildad nunca cambian”.
Con motivo de la sesión con los responsables de colegios e institutos de Navarra García Aguado y Castaño advirtieron, además, de que “todo lo que antes costaba tanto conseguir hoy ya no cuesta casi nada. Sin embargo, los valores se adquieren con tiempo y es en esa inmediatez cuando se deja de aprender”.