Ruta Belenística
I.A./A.V., miércoles, 29 de noviembre de 2006
Almudi.org
Almunia de San Juan, Pomar, Monzón, Esplús, Graus, Peralta de la Sal y Torreciudad han vuelto a aunar esfuerzos para hacer realidad, por tercer año consecutivo, la Ruta del Belén, una iniciativa pionera en España que promociona conjuntamente sus nacimientos, cada uno con características propias, así como los atractivos turísticos del entorno en el que se ubican los montajes.
Aunque las poblaciones participantes son...
Ruta Belenística
I.A./A.V., miércoles, 29 de noviembre de 2006
Almudi.org
Almunia de San Juan, Pomar, Monzón, Esplús, Graus, Peralta de la Sal y Torreciudad han vuelto a aunar esfuerzos para hacer realidad, por tercer año consecutivo, la Ruta del Belén, una iniciativa pionera en España que promociona conjuntamente sus nacimientos, cada uno con características propias, así como los atractivos turísticos del entorno en el que se ubican los montajes.
Aunque las poblaciones participantes son las mismas que en 2005, hay algunas novedades, como la inclusión del belén de las Escuelas Pías de Peralta, que ayer presentaron en Huesca Elisa Sancho, alcaldesa de San Miguel de Cinca (municipio al que pertenece Pomar); Víctor Bayona, concejal de Cultura de Esplús; Francisco Pueo, de la Asociación Belenista “Isaac Lumbierres” de Monzón, y Álvaro Villalonga, del Patronato de Torreciudad. Todos agradecieron la implicación de instituciones y de quienes montan los belenes que se abrirán en los próximos días, “los verdaderos protagonistas”, dijo Bayona.
La de los Escolapios, con nacimientos de diversas partes del mundo, es la única incorporación en esta edición y se suma en Peralta al de Javier Rami, con todo tipo de mecanismos, que ya estaba incluido en la Ruta. No obstante, los promotores de esta iniciativa indicaron que ha habido varias solicitudes de adhesión, pero llegaron demasiado tarde para este año. “Hay que marcar unos mínimos de dimensiones y horarios de visita”, afirmó Elisa Sancho.
Nacimiento de Torreciudad
El Belén de Torreciudad se colocó por primera vez hace veinte años, sustituyendo a otro anterior más sencillo. El actual representa una casa de seis metros de largo por casi cuatro de alto, levantado sobre varias vigas y traviesas de madera de pino, de paredes revestidas por costales -envejecidos con una ligera aplicación de betún de judea- y culminada con un tejado de dos aguas.
La casa pretende aparentar una vivienda rural del Pirineo y tiene detrás un pueblo de pequeñas dimensiones situado sobre una montaña, localidad que el visitante aprecia a través del hueco que deja la apertura de la hoja superior de la puerta.
Esta casa abriga las imágenes de la Sagrada Familia, representada por las tallas de Jesús, María y José creadas en alabastro por Joan Mayné. Miden un metro de alto y sirvieron al escultor de inspiración para realizar las actuales esculturas del monumental retablo-custodia de Torreciudad. La escena se completa con un pastor, portando en sus brazos un corderillo, el buey y la mula recostados sobre el forraje y la paja, además de catorce ángeles dorados de distintos tamaños que revolotean por el portal, particularidad que se repite en otros lugares del santuario puesto que la titularidad de la Virgen de Torreciudad corresponde a la advocación de Nuestra Señora de los Ángeles.
Entre los detalles que adornan el pesebre navideño hay elementos rurales como un forca de madera para ventar la paja, un par de comederos -regalo de un vecino- candiles, faroles antiguos y elementos de cocina como la sartén sobre un caballete de hierro, junto a la chimenea que caldea la comida para los habitantes del hogar.