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Dirección: Keanu Reeves.Países: USA y China. Año: 2013. Duración: 105 min. Género: Acción, artes marciales.Interpretación: Keanu Reeves (Donaka Mark), Tiger Chen (Chen Lin-hu “Tigre”), Simon Yam (Wong), Karen Mok (Suen Jing-si), Yu Hai (Maestro Yang), Ye Quing (Ching Sha), Iko Uwais. Guion: Michael G. Cooney. Producción: Lemone Syvan y Daxing Zhang.Fotografía: Elliot Davis. Montaje: Darek Hui. Diseño de producción: Yohei Taneda.Distribuidora: Universal Pictures International Spain. Estreno en España: 11 Abril 2014
Reseña:
Chen Lin-Hu, alias “Tigre” (Tiger Chen), trabaja como mensajero en Beijing, la ajetreada capital de China. Pero, cuando finaliza su jornada laboral, se convierte en una estrella de las artes marciales, que ha ascendido por los diferentes niveles en representación del tradicional Tai Chi, estilo Ling Kong, que aprende en un deteriorado templo shaolin de manos de su anciano “shifu”, el paciente maestro Yang (Yu Hai). El Tai Chi suele asociarse con ejercicios tranquilos y comedidos, pero “Tigre” ha perfeccionado el antiguo arte, y ha empezado a hacerse un nombre en el prestigioso campeonato de artes marciales Wulin Wang.
Su ascenso llama la atención de Donaka Mark (Keanu Reeves), un poderoso hombre de negocios residente en Hong Kong, que organiza peleas clandestinas sin reglas y las retransmite de forma privada a apostantes ricos. Donaka necesita a una nueva estrella, e intenta atraer a “Tigre” a sus redes, alentando incluso la clausura y demolición del viejo templo en que entrena. Pero entorpecerá sus propósitos la incansable detective Suen Jing-Si (Karen Mok), de la OCTB, la Unidad Contra el Crimen Organizado, que lleva años intentando procesar a Donaka.
El actor Keanu Reeves debuta brillantemente como director en esta vigorosa y nostálgica película de artes marciales, coproducida entre China y Estados Unidos, y que imita los mejores modelos del género, sobre todo los procedentes de Hong Kong. Sobrio pero eficaz en su papel de antagonista, Reeves se desmelena tras la cámara, ofreciendo una vibrante colección de peleas memorables, maravillosamente coreografiadas por el especialista Yuen Woo-Ping.
En ellas, el actor estadounidense nacido en Beirut demuestra su amor por las artes marciales, cuyos diversos estilos son repasados en la película, que también intenta profundizar en su pacifista filosofía de fondo. Una filosofía en la que las virtudes tradicionales —sobre todo, el autocontrol— se imponen por encima de una auténtica religiosidad y se enfrentan certeramente al deshumanizado ultracapitalismo materialista de la China actual, en la que su supuesto comunismo militante no aparece por ninguna parte, al menos en sus inmensas y contaminadas metrópolis, magníficamente fotografiadas por Elliot Davis.
Además de realizar un impresionante despliegue físico y técnico, el ex doble de acción Tiger Chen —entrenador y amigo personal de Keanu Reeves desde que se conocieron durante el rodaje de “Matrix”— da también la talla en esas secuencias más existenciales que místicas, en las que muestra la peliaguda lucha interior de “Tigre” entre sus ansias de paz y sus instintos violentos. También cumplen los actores secundarios, aunque las subtramas policiaca, romántica y familiar tienen mucha menos entidad que la trama principal.
Queda, en todo caso, una notable película de artes marciales, con sugerentes referencias a “El Show de Truman”, ciertamente violenta, pero respetuosa con el buen gusto del espectador y lúcida en su defensa de la integración en la modernidad de los valores tradicionales. Entusiasmará a los aficionados al género y permite albergar esperanzas sobre la posible carrera futura de Keanu Reeves como director. (Cope J. J. M.)