Unas vidas que muestran la fe de una Europa desconocida, llena de vigor y creatividad, que contrasta…
Unas vidas que muestran la fe de una Europa desconocida, llena de vigor y creatividad, que contrasta con la decadencia y el cansancio vital de tantos otros lugares de Occidente
El baile tras la tormenta es una sucesión de relatos de disidentes. Epopeyas heroicas sería su resumen exacto. Porque en el mundo desquiciado del pasado comunismo soviético, durante las décadas centrales del siglo XX, la disidencia solía pagarse con la deportación, la cárcel, la tortura y la muerte. Así lo corroboran innumerables testimonios, desde el Nobel Solzhenitsin hasta la feminista Goricheva.
Si no se ha vivido en ese infierno es difícil creerlo, incluso imaginarlo. Pero fue real, abrumadoramente real. Sin embargo, esa moneda tiene otra cara: en medio de esos años tenebrosos brillan las vidas de quienes no estuvieron dispuestos a dar la espalda a Cristo, hombres y mujeres de toda edad y condición. Si muchos ya descansan en paz, otros han vivido para contarlo al periodista José Miguel Cejas, que recopila con notable acierto. Historias duras y hermosas, como los años de cárcel del joven sacerdote jesuita Sigitas Tamkevicius, actual obispo de Kaunas (Lituania).
Por estas páginas se asoman finlandeses, lituanos, estonios, letones, rusos y escandinavos. Hombres y mujeres de los ambientes culturales y sociológicos más diversos: músicos, pintores, reporteros de guerra, sacerdotes, médicos, actores de teatro, cantantes de rock, profesores de Universidad…
Este libro tan enriquecedor es también, y no debo omitirlo, una profunda lección de historia: de lo que Hermann Tertsch ha llamado, con acierto, la venganza de la historia.