Benedicto XVI vive su particular cuenta atrás hacia la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid. Durante este fin de semana el Santo Padre ha viajado a Croacia, en el último de los viajes que le ha llevado fuera de Italia antes de la JMJ.
Como en algunos de sus últimos viajes el Papa ha querido reunirse con los jóvenes locales, a los que ha animado a asistir a la cita de Madrid en agosto. En esta ocasión Benedicto XVI ha vivido una vigilia de oración en la plaza central de Zagreb, la capital croata. Desde ella ha rememorado parte de su mensaje a los jóvenes con ocasión de la próxima Jornada Mundial de la Juventud: «Vuestra juventud es un tiempo que el Señor os da para poder descubrir el significado de la existencia. Es el tiempo de los grandes horizontes, de los sentimientos vividos con intensidad, y también de los miedos ante las opciones comprometidas y duraderas, de las dificultades en el estudio y en el trabajo, de los interrogantes sobre el misterio del dolor y del sufrimiento». El Papa ha presentado a Jesús como la respuesta a esos anhelos, «al deseo de una vida que merece la pena ser vivida».
Benedicto XVI también ha dedicado un tiempo para hablar sobre el tema elegido para la Jornada Mundial de la Juventud: "Arraigados en Cristo podréis vivir en plenitud lo que sois". El Papa también ha advertido a los jóvenes que «el camino con Él requiere esfuerzo y sacrificio personal, pero vale la pena».
El Santo Padre ha animado a los jóvenes a vivir positivamente ese camino: «No cedáis a la tentación de poner la confianza absoluta en el tener, en las cosas materiales, renunciando a descubrir la verdad que va más allá, como una estrella en lo alto del cielo, donde Cristo quiere llevaros. Dejaos guiar a las alturas de Dios».
Croacia es uno de los países de la antigua Europa del Este desde el que más jóvenes viajarán a Madrid: cerca de 4.000 jóvenes ya se han inscrito en la Jornada Mundial de la Juventud, que reunirá en Madrid a más un millón de personas en agosto de este año.