El Mercurio (Entrevista de Gustavo Villavicencio)
“Creo que los jóvenes ven en él alguien que quiere su felicidad y les dice la verdad, sin buscar la adulación o el fácil entusiasmo»
Entrevista a Pablo Blanco, autor de la primera biografía de Benedicto XVI antes de que el cardenal Ratzinger fuera elegido Papa, y quien hace más de un año concluyó la más completa biografía del actual Pontífice: Benedicto XVI. El Papa alemán.
¿Se observa desde el Vaticano que ha declinado la fe de quienes se dicen católicos? ¿Es ésa una de las razones de proclamar un Año de la Fe?
Tal vez podría venir una nostalgia hacia supuestos e hipotéticos tiempos pasados. Pienso que esta postura no es correcta, al menos del todo. En algunos aspectos (no pocos), la Iglesia está mejor que hace unos siglos. Hay más libertad y más convicción personal. Por eso estamos asistiendo a un renacimiento en la fe, sobre todo en los jóvenes. Ahí están las arrolladoras Jornadas Mundiales de la Juventud. En España, este año ha crecido el número de seminaristas. Si estamos ante una crisis de fe, esta es una crisis de crecimiento. Por eso el Año de la Fe.
El Año del Sacerdocio quizás ha sido uno de los más duros para la Iglesia. ¿No cree que el Demonio anda más suelto que nunca −especialmente en tiempos en que se dice que no existe− procurando atacar al llamado "Guardián de la Fe", es decir, al ex Prefecto de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la fe?
El papa Benedicto XVI dijo que el mayor enemigo era el pecado dentro de la Iglesia. También la Iglesia necesitaba una purificación después de los casos de pederastia. Por eso Juan Pablo II y Benedicto XVI comenzaron con lo que los periodistas han llamado la "Operación Limpieza" en la Iglesia. Se da entonces la paradoja de que incluso la acción del demonio acaba siendo beneficiosa para la Iglesia de Cristo. Dios es más grande.
Se observa una lucha abierta y a la vez solapada contra la Iglesia, los valores cristianos, la vida, el matrimonio. ¿Cómo se perciben desde Roma esos ataques? ¿De dónde se cree que provienen, cuando se observa que en muchos casos son concertados?
Yo no vivo en Roma, así que no puedo decir cómo se ven las cosas desde allí. Los ataques a la Iglesia siempre han existido, empezando por lo que acabamos de conmemorar en la Semana Santa... Por eso el Señor repite «no tengáis miedo». Es algo que nos repite a todos los creyentes. Lo importante es que los cristianos no tengamos miedo a esas tendencias que van en contra de la presencia de Dios en la sociedad. Ataques habrá, pero hemos aprendido a defendernos... sin ofender a nadie.
Se habla poco de los anglicanos que han adherido a Roma. ¿Qué ha aprendió la Iglesia de esta experiencia?
Es una experiencia que ha ido creciendo poco a poco. Este Domingo de Resurrección se han unido a la Iglesia católica otros doscientos cristianos procedentes del anglicanismo. La Iglesia pienso que ha aprendido a no tener prisa y a darse cuenta de que es Dios quien actúa. Cuando nadie se lo esperaba, de repente un grupo no pequeño de anglicanos se ha adelantado por la derecha...
Tras el asunto Ratisbona y las aclaraciones del caso, ¿considera que la relación de la Iglesia con el mundo islámico salió fortalecida?
Así lo dicen ellos mismos. Nunca ha habido oficialmente tanto diálogo con el islam que en el momento presente. Después de que 167 líderes musulmanes (muftíes, líderes e intelectuales, fundamentalmente) subscribieran el discurso de Ratisbona con su propia firma, ha habido toda una serie de debates en los que se apela a la razón, tal como hizo el papa el 12 de septiembre de 2006 en Ratisbona. Era la respuesta de Benedicto XVI a lo ocurrido el 11 de septiembre de 2001, justo cinco años y un día antes...
¿Cómo es el actual acercamiento hacia las iglesias rusa y griega? ¿Falta, a su juicio, mucho o muchísimo para que esos ortodoxos puedan acercarse a Roma?
La pelota está en su tejado, como se suele decir. El problema ahora no está entre la Iglesia católica y los Patriarcados ortodoxos, sino entre ellos mismos. Están viendo si son capaces de celebrar un sínodo panortodoxo, que hace más de un siglo que no tiene lugar. La Iglesia católica espera este movimiento de unidad entre ellos, para poder seguir avanzando hacia la única Iglesia de Cristo.
Algunos sacerdotes austríacos se han caracterizado por tener posiciones muy reñidas con la fe de Roma. ¿Obedece ello a un simple descriterio o es también una forma de atacar y causarle dolores de cabeza a un Papa alemán?
Las reivindicaciones de la Pfarrerinitiative austriaca obedecen a un modelo de Iglesia cuyo origen es más ideológico que teológico. Son indudables las buenas intenciones de muchos de estos sacerdotes, pero me parece que la propuesta del papa en la misa crismal tenía una lógica plenamente cristiana: frente a la "llamada a la desobediencia" que proponían estos párrocos austriacos, Benedicto XVI recordaba la obediencia de Cristo al Padre. El contraste resulta interesante...
La disidencia cubana ha criticado mucho al Papa. ¿En qué medida hubo que renunciar a atender a algunos disidentes cubanos en aras de equilibrar y obtener conquistas tan importantes como que volviera a declararse feriado el Viernes Santo en la isla?
Los dos últimos papas han podido estar en Cuba, lo cual supone una discreta victoria. Cada vez hay más libertad religiosa en la isla de Fidel, aunque evidentemente faltan muchas libertades políticas y democráticas. Pienso que todo llegará. Por lo pronto, el Viernes Santo ha sido festivo —decía una cubanita en la televisión— gracias al papa... y a la Revolución, añadió como poniendo cara de que se le olvidaba algo. Esperemos que este proceso siga adelante, y tengamos una Cuba libre, y también cristiana.
¿En qué medida los libros del Papa publicados durante su pontificado, como ‘Jesús de Nazaret’, han acercado a su persona al pueblo fiel? ¿O han llegado meramente a un público más culto?
‘Jesús de Nazaret’ no es un libro de divulgación: es un libro para especialistas y para cristianos cultos. Benedicto XVI lo ha escrito porque pensaba que era una de sus obligaciones como papa. Su principal deber es hablar de Jesucristo. Para él es también un tema crucial: hablar de la divinidad de Jesucristo en el momento presente es algo fundamental. Por eso dedica sus ratos libres a esta obra de síntesis. Es el libro de su vida.
¿Cómo sostiene el Santo Padre la Iglesia con su propia vida de fe: oración, santa misa, santo rosario, devoción a la Virgen...
No es solo un papa-teólogo, sino que es también una persona profundamente piadosa. Tiene un gran amor a la Escritura —tal como se puede ver en el ‘Jesús de Nazaret’— y a la liturgia, tal como se puede ver en las muchas obras dedicadas a este tema. Celebra la misa todas las mañanas, con gran unción. Se ve también en las celebraciones transmitidas por televisión. Verle también —por ejemplo— en el Viacrucis ha sido algo inspirador. Él siempre es consciente de la unión con Dios que se da por medio de la piedad. Algún periodista decía en broma que parecía un niño el día de su primera comunión...
¿Cómo explica, después de Juan Pablo II, que Benedicto XVI tenga tanta acogida entre los jóvenes?
Es curioso, pues no tiene una personalidad escénica o mediática. Sin embargo, sí pienso que es un buen comunicador. Sus palabras son claras y luminosas. Tiene también esas imágenes que emplea, son como destellos, fogonazos, flashes... Pero sobre todo creo que los jóvenes ven en él alguien que quiere su felicidad y les dice la verdad, sin buscar la adulación o el fácil entusiasmo. Los jóvenes enseguida se dan cuenta de esto.
¿Por qué razón el relativismo es tan recurrente en los discursos del Papa?
Porque es una de las constantes de nuestra cultura y nuestra sociedad. Tras la caída del muro del comunismo —ya casi del todo derruido— por parte de Juan Pablo II, el papa actual se enfrenta con el muro del relativismo, cuyos efectos son también terribles. Por eso Benedicto XVI habla tanto de la verdad y el amor, como dos principios complementarios. El amor sin verdad se vuelve arbitrario y cae fácilmente en el sentimentalismo o en el fanatismo. La verdad sin amor se vuelve dura, rígida, inhumana. Creo sin embargo que habla más de amor y verdad (en positivo) que de relativismo...
¿Por qué la libertad religiosa es una constante preocupación en el Pontificado de Benedicto XIV?
Porque existen pruebas evidentes de su ausencia, de la continua violación de estos derechos. Solo hace falta ver un noticiero un solo día. Para el papa actual, sin embargo, esa libertad solo puede darse cuando se da con la verdad: con la verdad sobre las personas, con la justicia y con el amor. La libertad no es una conquista abstracta, sino que tiene sus raíces en la verdad, en la realidad, repite. Entonces la libertad será un árbol frondoso con muchos frutos.
¿Cuál ha sido el papel de Benedicto XVI frente al tema de la pedofilia?
Determinante, como lo fue con Juan Pablo II cuando llevaron estas competencias a Roma en 2001. Se ha jugado el prestigio y ha afrontado el problema de modo directo. Como decimos en España, ha cogido el toro por los cuernos... El sentido de la justicia y el amor a la verdad que tenían ambos papas han sido el mejor apoyo para que se pudieran tomar las medidas que había que tomar, en ámbito tanto civil como eclesiástico. Como decíamos, la Operación Limpieza ha empezado en la Iglesia. Ahora tal vez deba seguir en otros ámbitos.
¿Cuál es su evaluación de estos 7 años de Pontificado?
Años duros, pero llenos de contenido: tres encíclicas, homilías inspiradas, catequesis esclarecedoras. Y 7 palabras para estos 7 años de pontificado: razón, corazón, creación, adoración, Jesucristo, Iglesia, belleza.
Introducción a la serie sobre “Perdón, la reconciliación y la Justicia Restaurativa” |
San Josemaría, maestro de perdón (1ª parte) |
Aprender a perdonar |
Verdad y libertad |
El Magisterio Pontificio sobre el Rosario y la Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae |
El marco moral y el sentido del amor humano |
¿Qué es la Justicia Restaurativa? |
“Combate, cercanía, misión” (6): «Más grande que tu corazón»: Contrición y reconciliación |
Combate, cercanía, misión (5): «No te soltaré hasta que me bendigas»: la oración contemplativa |
Combate, cercanía, misión (4) «No entristezcáis al Espíritu Santo» La tibieza |
Combate, cercanía, misión (3): Todo es nuestro y todo es de Dios |
Combate, cercanía, misión (2): «Se hace camino al andar» |
Combate, cercanía, misión I: «Elige la Vida» |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía II |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía I |