Al dar la bienvenida a los jóvenes peregrinos reunidos en Sydney
El primer ministro de Australia ha dado la bienvenida a su país a los participantes en la Jornada Mundial de la Juventud, afirmando que la fe y la razón son "buenas compañeras" en la historia y lo serán en el futuro.
Kevin Rudd habló a los jóvenes reunidos en Sydney para la 23 Jornada Mundial de la Juventud antes de la misa de inauguración celebrada por el cardenal George Pell.
"Australia da la bienvenida a Sydney a los jóvenes del mundo. Australia da la bienvenida a los jóvenes del mundo a esta celebración de fe y esta celebración de vida. Y como primer ministro de Australia os doy la bienvenida a vosotros de cada tierra, cada sendero, cada continente en este, nuestro planeta", dijo.
El líder dijo a los jóvenes que son la "luz del mundo en un tiempo en el que el mundo tiene mucha oscuridad".
"Demasiado a menudo en la historia del mundo cuando los jóvenes viajaban en gran número a otras partes del mundo, lo hacían a causa de la guerra. Pero vosotros estáis aquí como peregrinos de paz", dijo.
El primer ministro habló sobre el papel de la fe en el mundo actual y en la historia.
"Algunos dicen que no hay lugar para la fe en el siglo XXI -añadió-. Yo digo que están equivocados. Algunos dicen que la fe es el enemigo de la razón. Y digo, también ellos están equivocados. Porque la fe y la razón son buenas compañeras en la historia humana y en nuestro futuro humano. Rico en humanidad, rico en progreso científico".
"Algunos sólo hablan de lo que ven mal en el cristianismo y en la Iglesia. Yo digo, déjennos hablar también de lo que está bien en el cristianismo y en la Iglesia".
Rudd subrayó que la Iglesia inició las primeras escuelas y hospitales para los pobres: "Y digo que el cristianismo ha sido una abrumadora fuerza del bien en el mundo".
"Australia es una tierra de gran libertad, una tierra de muchas culturas, una tierra de muchos credos -añadió Rudd-. Pero también una tierra profundamente marcada y orgullosa de esta herencia y futuro cristianos de la nación. Y dentro de esta gran herencia cristiana, honramos también profundamente la gran herencia católica de Australia".
El catolicismo es ahora la tradición religiosa con el mayor número de adeptos en el país, en torno al 26% de sus veinte millones de habitantes.
"Venís aquí como jóvenes peregrinos del mundo -añadió Rudd-. Os digo para concluir, como primer ministro de Australia, que sois huéspedes bienvenidos a nuestra tierra. Ojalá que cada uno de vosotros se enriquezca durante el tiempo que pase entre nosotros, así como vosotros enriquecéis a Australia. Bienvenidos a Australia".