Aceprensa
El año pasado Gobierno español y Iglesia católica acordaron aumentar la asignación tributaria destinada a esta en la declaración de la renta, al tiempo que se eliminaba tanto la aportación directa suplementaria con cargo a los Presupuestos del Estado como la exención del IVA, de las que hasta ahora disfrutaba. El nuevo sistema comenzará a aplicarse en 2008. Por eso, la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha lanzado una campaña informativa para dar a conocer su actividad, explicando los beneficios que la labor de sus instituciones aporta a la sociedad.
La primera fase de la campaña comprende infocomerciales en televisión, y anuncios en prensa, televisión e Internet. Además, la Conferencia Episcopal ha publicado un dossier en el que ofrece algunos datos y explica con más detalle su trabajo.
Las cifras del dossier hablan de la ingente labor institucional de la Iglesia en España, donde el 77,6% de la población se declara católica y el 77% de los alumnos eligieron cursar la asignatura de Religión católica durante el curso pasado. La Iglesia católica atiende 22.700 parroquias, cuenta con 20.000 sacerdotes, 5.000 colegios concertados (calcula que ahorra casi 3.000 millones de euros anuales a las arcas públicas) o 200 centros de educación universitaria. Además, en un país donde cada semana entre 7 y 8 millones de personas acuden a misa, y anualmente se realizan 283.000 bautismos, más de 150.000 matrimonios canónicos, 265.000 primeras comuniones o 133.000 confirmaciones, la labor de la Iglesia se extiende por cientos de centros hospitalarios, orfanatos, centros sociales y de caridad, de atención de toxicómanos o enfermos de sida, cárceles, etc.
Frente a este panorama de trabajo, la asignación de un obispo es de 900 € mensuales, y la gran mayoría de sacerdotes perciben entre 600 y 800 € de sustentación base y cotizando a la Seguridad Social por la base mínima, sin coberturas ordinarias de baja laboral o desempleo; la mayor parte de sacerdotes jubilados reciben, además, la pensión mínima.
El dossier de la CEE recuerda que la labor principal de la Iglesia es la evangelizadora, su actividad pastoral. Además, su trabajo se desempeña en el terreno asistencial, educativo y de conservación de patrimonio. Pero ninguno de esos cuatro fines puede ser contemplado de manera aislada, a juicio de la CEE. Los miles de voluntarios de la Iglesia no nacen por generación espontánea, la fe en el Evangelio da razón de ser a toda su actividad, afirma.
Para cumplir estos fines, la Iglesia católica en España cuenta con diferentes fuentes de financiación. La asignación tributaria que ahora será el 0,7% de la cuota íntegra supone solo entre el 20% y el 25% de la cantidad anualmente gastada en parroquias y centros. El resto procede de las aportaciones directas de los fieles que el dossier señala como la principal fuente, de rendimientos del patrimonio eclesiástico y de otras fuentes como las subvenciones para atención social, fondos para rehabilitación del patrimonio cultural o ingresos por la realización de actividades remuneradas como el trabajo en colegios, hospitales, o el mantenimiento de editoriales y librerías.
El planteamiento de fondo que transmiten los datos es que como dice el dossier a partir de ahora, el sostenimiento económico de la Iglesia Católica dependerá exclusivamente de la voluntad de sus fieles y simpatizantes, y que por lo tanto se debe producir un cambio de mentalidad entre los católicos. Por una parte, se trata de que los católicos marquen en la declaración de la renta la casilla de la Iglesia para que se le destine el 0,7% (actualmente lo hace uno de cada tres contribuyentes). Por otra, se quiere que los fieles colaboren en el sostenimiento de la Iglesia mediante suscripciones, que garanticen a las parroquias contar con recursos estables, lo que permitirá hacer planes a corto y largo plazo.
De ahí esta campaña publicitaria, ya que después de un estudio de mercado se constató la falta de información sobre el trabajo y la financiación de la Iglesia. El estudio concluía que las personas más críticas con la labor de la Iglesia son las que tienen menos información de primera mano sobre su actividad real y quienes más se dejan llevar por tópicos. La campaña irá por eso destinada a transmitir el cambio en el sistema de financiación, la razón de ser de la Iglesia y su trabajo, el destino de los fondos recaudados y la necesidad de que los fieles y quienes aprecian la labor de la Iglesia se impliquen en su sostenimiento.
* * * * * * * *
Youtube.com
El nuevo sistema de asignación tributaria
La Asignación Tributaria a favor de la Iglesia Católica deriva directamente del Acuerdo sobre Asuntos Económicos suscrito el 3 de enero de 1979 entre la Santa Sede y el Estado Español. Su origen deriva de las sucesivas desamortizaciones del siglo XIX. Hoy en día, y al margen de motivaciones jurídicas, el Estado tiene la obligación de atender las demandas e los ciudadanos en materia religiosa. En septiembre de 2006 se alcanzaron unos puntos de acuerdo importantes de reforma del sistema, que son:
1) Elevación, con carácter indefinido del porcentaje de asignación tributaria que pasa del 0,5239 al 0,7%. No se establece un periodo concreto de vigencia del sistema para evitar el que cada año tenga que regularse el porcentaje, que será del 0,7% salvo que se establezca lo contrario.
2) Desaparición del carácter mínimo de los pagos a cuenta. Desde el 1 de enero la Iglesia percibirá únicamente para su sostenimiento la cantidad que resulte de la asignación tributaria. Desaparece el complemento presupuestario, es decir, la Iglesia deja de percibir cantidades con cargo a los Presupuestos Generales del Estado para su sostenimiento básico.
3) Operativamente, el sistema entra en vigor en la renta de 2007, cuya declaración se hará en 2008. La primera declaración en la que los contribuyentes podrán asignar el 0,7% se realizará en la primavera de 2008.
4) El importe a cuenta a recibir durante el año 2007 se eleva en un 4%, con relación a 2006. Se ha pactado un incremento pequeño de los pagos a cuenta con criterios de prudencia.
5) El dinero recibido a cuenta en 2007 se liquidará en noviembre del 2008, cuando se tengan los datos de la declaración efectuada meses antes. Los contribuyentes harán la declaración de 2007 en la primavera de 2008 y antes del 30 de noviembre se efectuará una liquidación provisional que podrá ser en un sentido u otro.
6) Se elevan a definitivas las cantidades recibidas en 2006. Dado que en 2006 se había fijado el importe máximo a percibir, que coincidía con el mínimo según la redacción de la ley de Presupuestos del año 2000, parecía lógico dejar como definitivo el importe de los pagos a cuenta.
7) Hay un compromiso de mejora de la memoria justificativa que ya venía entregando la Iglesia cada año. Se trataría de entregar una información más sencilla y útil sobre el destino de los fondos obtenidos por la asignación tributaria.
8) Renuncia a la exención por IVA en la adquisición de bienes inmuebles y a la no sujeción en la adquisición de objetos destinados al culto. Dicha renuncia se tendrá que establecer mediante el instrumento legal correspondiente.
A pesar de lo dicho anteriormente la principal fuente de financiación de la Iglesia son las aportaciones directas de los fieles.
Propuestas de futuro
1. El peso fundamental de la financiación de la Iglesia recae necesariamente en la aportación voluntaria de los fieles. En este sentido, es urgente concienciar a todos los fieles acerca de la necesidad de sostener a su Iglesia y de que sus aportaciones son la parte fundamental y decisiva de la misma.
2. Existe margen suficiente para el porcentaje de asignantes a favor de la Iglesia Católica experimente un crecimiento notable. Para ello, van a ser determinantes las posibles campañas en medios de comunicación. El primer año puede ser una buena piedra de toque para evaluar esta posibilidad.
3. La regulación establecida para la nueva asignación tributaria ofrece un marco estable e indefinido que permite pensar en una cierta estabilidad a medio plazo.
4. El eventual incremento de la cantidad a percibir por las Diócesis les permitirá actualizar algunas partidas de remuneración de sacerdotes clararmente desfasadas y/o iniciar un proceso de cobertura de nuevas necesidades pastorales.
5. Hay que conseguir desechar definitivamente algunos clichés sociales que sitúan a la Iglesia como una entidad con grandes riquezas y que se aprovecha de una situación de privilegio en la sociedad. Esa imagen debe ser sustituida por algo mucho más realista dando datos veraces de la realidad económica de la misma.
6. Hay que procurar, con todos los recursos posibles, establecer mecanismos de colaboración estable por parte de las familias, a través de cuotas periódicas domiciliadas.
7. La Iglesia debe procurar, con gran sentido eclesial, poner en valor todo aquello que hace y tiene repercusión social. Lamentablemente, no existe una correlación satisfactoria entre la actividad de la Iglesia y cómo ésta es percibida socialmente. Son necesarios más trabajos de investigación en esta línea
8. La transparencia informativa, en el plano económica, va a ser fundamental como un mecanismo más de comunicación a la sociedad. Todo, esfuerzo en esta dirección es absolutamente necesario.
9. La involucración de los seglares en las tareas de gestión de los recursos económicos de las entidades de la Iglesia debe verse como una tarea de apoyo a la Iglesia de gran valor. Tanto por la vía del voluntariado, fundamentalmente en las parroquias, como a través de la captación de buenos profesionales, siempre con claro espíritu eclesial, debe entenderse como un pilar fundamental para la mejora de la gestión.
10. Las instituciones de la Iglesia deben realizar un estudio exhaustivo de todas las fuentes de financiación que puedan ser compatibles con su actividad. Algunas fuentes de la tradición pueden ser recuperadas y puestas al día (por ejemplo, las herencias), mientras que otras, tal vez deberían replantearse.
11. Algunas instituciones pueden disponer de un patrimonio que convenientemente trabajado puede ofrecer una buena rentabilidad. En este campo, es muy importante conjugar profesionalidad, transparencia e inversiones acordes con la entidad en un entorno de seguridad, dado lo sensible del asunto.
* * * * * * * *
Fernando Giménez Barriocanal
10 Mitos e interrogantes sobre la economía de la Iglesia
Desde el 1 de enero de 2007, la Iglesia Católica sólo percibe del Estado lo que los contribuyentes deciden a través de su asignación tributaria. Todavía hoy en España circulan muchos mitos sobre los dineros de la Iglesia. Unos por desconocimiento, otros simplemente por prejuicios. Veamos algunos ejemplos:
1. "La Iglesia es una institución con mucho poder y dinero. FALSO. La Iglesia católica en España, desde el punto de vista civil no es una institución o un holding cuya cabeza es la Conferencia Episcopal. La Iglesia se concreta en 69 diócesis, 22.700 parroquias, etc. Cada entidad goza del la autonomía que le confiere el derecho canónico y, en consecuencia, no se puede hablar de una organización económica única.
2. "El Estado financia a la Iglesia miles de millones de euros, una cantidad enorme". FALSO. La única cantidad que recibió la Iglesia para su sostenimiento en 2006, fueron 144 millones de euros. Si esa cantidad la comparamos con los 20.000 sacerdotes y las 22.700 parroquias, apenas saldría para pagar el recibo de la luz y unos 300 euros/mes por sacerdote.
3. "El Estado subvenciona o regala a la iglesia 3.000 millones de euros para sus colegios". FALSO. El dinero que aquí se menciona corresponde a los conciertos educativos. Es decir, al dinero destinado para que los padres puedan ejercer su derecho a la libertad de enseñanza. Ese dinero, recibido por los colegios, cubre escasamente el sueldo de los profesores de los centros. En realidad, son los colegios de la Iglesia los que ahorran, a día de hoy, más de 3.000 millones de euros a la Administración Pública, ya que esta destina para cada niño escolarizado en un centro concertado la mitad de dinero que en un colegio público.
4. "La Iglesia no rinde cuentas a nadie". FALSO. Todos los años, la Conferencia Episcopal remite a la Dirección General de Asuntos Religiosos una memoria de 300 páginas donde se detallan uno a uno el total de los movimientos económicos realizados con el dinero recibido.
5. "La Iglesia mantiene grandes privilegios fiscales". FALSO. El régimen fiscal previsto en la Ley 49/2002 para las entidades no lucrativas de nuestro país superó ampliamente el régimen acordado para la Iglesia en 1979. En consecuencia, podemos afirmar que las entidades de la Iglesia tienen, en un 99%, el mismo régimen fiscal que cualquier fundación, la ONCE, la Cruz Roja, etc.
6. ¿Porqué un Estado laico tiene que colaborar con la Iglesia en su financiación?. Hay muchas razones. Al margen de las motivaciones históricas (desamortizaciones del siglo XIX), la demanda de servicios religiosos en España (cerca de 8 millones de ciudadanos acuden a misa cada domingo), justifica por si misma la colaboración del Estado, que debe atender a los requerimientos de los ciudadanos.
7. "La Iglesia sería más libre si renunciara a toda ayuda estatal". FALSO. Como hemos comentado antes, el hecho de que el Estado financie o colabore con un actividad no debe significar nunca una relación de dependencia con la Administración. El Estado está al servicio de todos los ciudadanos y debe colaborar en el desarrollo integral de la persona en sus múltiples dimensiones. Esto es lo que justifica, entre otras, la atención a la dimensión cultural, (cine, teatro, museos, bibliotecas, arte..), deportiva y por supuesto su dimensión trascendente.
8. "Yo estoy dispuesto a colaborar con la obra social de la Iglesia, pero no con su Jerarquía ni con el mantenimiento de los curas". Quien así opina desconoce lo que es la Iglesia. Es cierto que la Iglesia en España despliega una importantísima obra social. Hay más de 3.500 centros asistenciales donde son asistidas más de 2.500.000 personas cada año. Especial mención merece la actividad con aquellos más necesitados (enfermos de sida, presidiarios, emigrantes, sin recursos, etc.), contando con más de 60.000 voluntarios en Caritas. Pero toda esa actividad, muy valorada por toda la sociedad, no nace por generación espontánea. Los que desarrollan esta actividad han recibido previamente el anuncio de la Buena Noticia de Cristo Resucitado, a través de una predicación en la Iglesia y viven y alimentan su fe en la Iglesia. Han aprendido que Dios les ama y que les propone darse a los demás, descubrir que en el prójimo está el rostro de Cristo. No se puede desligar la actividad asistencial de la actividad evangélica y litúrgica de la Iglesia.
9. "Los curas viven muy bien". FALSO. Sobre este asunto también hay una grave confusión. Los sacerdotes, con carácter general, tienen una retribución que oscila entre los 600 y 850 euros al mes. Cotizan por el salario mínimo y a la hora de la jubilación perciben de la Seguridad Social la pensión mínima. Algunos disponen de vivienda parroquial, no siempre en buenas condiciones y en general, no se puede afirmar que tengan un nivel de vida por encima de la media.
10. "La Iglesia tiene mucho dinero en bolsa. ¿No dice que es pobre? ¿Por qué no lo da a los más necesitados?". Entre 40.000 entidades es lógico que haya dinero invertido, pero no son sobrantes. Se trata de fondos procedentes de herencias, donaciones y fundaciones con fines propios y cuyos rendimientos financian de manera permanente actividades como educación, formación sacerdotal, desarrollo asistencial... Dichas actividades dependen de la permanencia de esos fondos y de su adecuada gestión, profesional, conservadora del capital y con criterios éticos.Introducción a la serie sobre “Perdón, la reconciliación y la Justicia Restaurativa” |
San Josemaría, maestro de perdón (1ª parte) |
Aprender a perdonar |
Verdad y libertad |
El Magisterio Pontificio sobre el Rosario y la Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae |
El marco moral y el sentido del amor humano |
¿Qué es la Justicia Restaurativa? |
“Combate, cercanía, misión” (6): «Más grande que tu corazón»: Contrición y reconciliación |
Combate, cercanía, misión (5): «No te soltaré hasta que me bendigas»: la oración contemplativa |
Combate, cercanía, misión (4) «No entristezcáis al Espíritu Santo» La tibieza |
Combate, cercanía, misión (3): Todo es nuestro y todo es de Dios |
Combate, cercanía, misión (2): «Se hace camino al andar» |
Combate, cercanía, misión I: «Elige la Vida» |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía II |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía I |