En julio de este mismo año, Alfa y Omega publicó la petición de ayuda de unos voluntarios de la organización salesiana Jóvenes del Tercer Mundo, que habían permanecido durante un año en la misión de Loma Alta (Bolivia). En su petición, los jóvenes explicaban que doña Ñeca necesitaba una pierna ortopédica tras haberse roto en una caída la que tenía hasta entonces, implantada como consecuencia de un cáncer. La respuesta de los lectores y de otros muchos que conocieron el caso por otras fuentes fue...
En julio de este mismo año, Alfa y Omega publicó la petición de ayuda de unos voluntarios de la organización salesiana Jóvenes del Tercer Mundo, que habían permanecido durante un año en la misión de Loma Alta (Bolivia). En su petición, los jóvenes explicaban que doña Ñeca necesitaba una pierna ortopédica tras haberse roto en una caída la que tenía hasta entonces, implantada como consecuencia de un cáncer. La respuesta de los lectores y de otros muchos que conocieron el caso por otras fuentes fue tan grande, que con lo recaudado se pudo comprar una nueva pierna ortopédica, operar a una mujer de un tumor en el cerebro y atender a otras familias. Como agradecimiento, la hermana Graciela Vargas, responsable de la Iglesia en Loma Alta, escribe esta carta para todos los lectores que tan generosamente colaboraron
Han pasado cincuenta años desde aquella mañana del 24 de septiembre de 1955, Sorpresa y novedad fue la primera vez que recibimos en la Comunidad de Loma Alta el semanario Alfa y Omega, nos sentimos muy conmovidos al ver a nuestros niños en las páginas de tan importante periódico.
El segundo envío lo recibimos con el mensaje de la Providencia de Dios, casi toda la página con la foto del grupo de madres más el escrito de Ricardo, pero al final aparece un recuadro pequeño: «Si quieres ayudar», ¡qué pequeño aviso! Pero ¡qué grandes, generosos y solidarios los lectores! Al poco tiempo, el 21-9-2005, recibimos en nuestra cuenta su donación: 11.899,65 euros.
Un gracias de corazón al personal que trabaja en este gran semanario, y a cada lector que ha contribuido para la pierna ortopédica de doña Ñeca; y no sólo es para ella su contribución, sepan que ayudarán a personas como doña Piedades. Mil dólares para la operación de un tumor en la cabeza. Madre de 6 hijos. Además, analizaremos detenidamente los casos de personas que necesitan la intervención de médicos especialistas.
Mientras vamos llevando a cabo cada ayuda, les estaremos dando cuenta con la documentación debida. ¡Gracias!, porque cada uno de ustedes son el corazón, la mano generosa de Dios vivo en el hoy. Con gratitud inmensa,
Hermana Graciela Vargas
http://www.alfayomega.es/