«El primer derecho humano es el derecho a la vida», afirma
LIMA, lunes, 14 de noviembre de 2005 (ZENIT.org).- El cardenal Alfonso López Trujillo, presidente del Consejo Pontificio para la Familia, clausuró este domingo en Lima el segundo Congreso Internacional Provida.
Unas cinco mil personas han participado en las actividades que el encuentro organizó a lo largo de diez días. Se designó a México como la próxima sede del III Congreso Provida dentro de dos años.
Antes de la celebración eucarística conclusiva, los participantes firmaron la Declaración de Lima, en la que exhortan a líderes políticos y miembros de la sociedad civil, en y en particular a los comprometidos en la defensa de los derechos humanos a «respetar y hacer respetar toda vida humana, desde la concepción/fecundación, hasta su muerte natural. El ser humano debe ser tratado como persona, desde el instante inicial de su existencia».
Publicamos a continuación la «Declaración de Lima» y el «Pronunciamiento de los jóvenes» que han adherido a la misma.
DECLARACION DE LIMA
Los representantes de organizaciones nacionales e internacionales, defensoras de la vida y la dignidad humanas, provenientes de diferentes partes del mundo, reunidos en Lima del 10 al 13 de Noviembre del 2005, en el II Congreso Internacional Provida (CIP) y en el 1er Simposium Juvenil Internacional Provida, en continuidad con el 1er CIP, realizado en Madrid el año 2003, nos dirigimos a:
Todos los gobernantes, líderes políticos, miembros de organizaciones de la sociedad civil, y medios masivos de comunicación, responsables de defender los derechos humanos,
CONVENCIDOS QUE:
1. El primer derecho humano es el derecho a la vida, sin ningún tipo de discriminación por sexo, edad, raza, credo, situación socio – económica, estado de salud o cualquier otra condición.
2. Por tanto, todo ser humano debe ser protegido y respetado, desde el momento de la concepción/fecundación, esto es el momento en que científicamente comienza la vida humana, que luego seguirá un proceso de desarrollo dentro y fuera del útero, tal como lo reconoce la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
3. Si el derecho a la vida es respetado, comienza a garantizarse el respeto de todos los demás derechos de carácter social, económico, político, etc.
4. Su primera responsabilidad como gobernantes y líderes, es defender incondicionalmente la vida de cada ser humano.
5. La familia basada en el matrimonio de varón y mujer, monogámico, indisoluble y abierto a la vida, es el espacio natural para que se genere y eduque todo ser humano.
A ELLOS LES EXIGIMOS QUE SE OBLIGUEN A:
1. Respetar y hacer respetar toda vida humana, desde la concepción/fecundación, hasta su muerte natural. El ser humano debe ser tratado como persona, desde el instante inicial de su existencia.
2. Eliminar toda práctica abortiva, eugenésica, eutanásica, mutilante, o que manipule la vida humana, cualesquiera sean los medios utilizados para ello.
3. Aprobar leyes que garanticen la estabilidad del vínculo matrimonial.
4. Respetar el derecho a la patria potestad, que por naturaleza corresponde a los padres; siendo siempre subsidiaria, la función del Estado en materia educativa.
5. Respetar el derecho fundamental a la objeción de conciencia, frente a leyes totalitarias o injustas.
6. Promover soluciones humanas y solidarias que siempre respeten y afirmen la vida, para las necesidades de mujeres y varones, tales como:
• Mortalidad materno perinatal: propiciar acceso y atención calificada del parto,
• Embarazo adolescente y enfermedades de transmisión sexual: promover y financiar programas que fomenten la castidad antes del matrimonio, y la fidelidad dentro de él.
• Violencia doméstica: ejecutar programas para fortalecer la familia basada en el matrimonio, y la educación de la juventud en las virtudes.
• Pobreza estructural: no combatir a los pobres sino la miseria. Los actores económicos promoverán educación, pleno empleo, salario equitativo y vivienda digna para todos. El Estado creará un marco estable y justo, que lo haga posible.
• Sistema sanitario insuficiente: Asegurar la provisión necesaria de recursos humanos, de infraestructura e insumos, y garantizar hábitos saludables en toda la población. Las prioridades sanitarias deben ser atendidas con equidad. El embarazo no es una enfermedad; por lo tanto el control de la natalidad, nunca podrá ser una prioridad sanitaria.
• Pornografía: dictar y hacer cumplir la legislación y sanciones, que eliminen el crimen organizado de la pornografía. La libertad de expresión, no debe ser utilizada para permitir este flagelo.
NOSOTROS NOS COMPROMETEMOS A:
1. Vigilar de manera permanente, el grado de observancia del derecho a la vida y dignidad humanas. Denunciar públicamente a quienes violen este derecho fundamental.
2. Crear organismos nacionales e internacionales de monitoreo a: partidos y dirigentes políticos, organizaciones de la sociedad civil, medios masivos de comunicación y sus financiadores, como paso previo para informar y documentar a la población, de modo que le permita iniciar las acciones judiciales, sociales o políticas pertinentes.
3. Promover y crear instituciones de bien público que prioricen, entre otras, las siguientes acciones:
• Presentación de proyectos normativos que promuevan la vida, la dignidad humana, el matrimonio y la familia.
• Difusión de métodos naturales sobre la fertilidad humana.
• Difusión de un enfoque adecuado de la sexualidad basada en una educación en virtudes y para el amor.
• Multiplicación centros de ayuda a la mujer.
• Creación de centros de orientación familiar.
• Tratamiento humanitario del síndrome post-aborto.
• Apoyo a las familias, para la atención prioritaria de la niñez en situación vulnerable.
• Desarrollo de alternativas humanas y dignas, de acompañamiento familiar a los ancianos, y cuidados paliativos para los enfermos terminales.
• Estudios interdisciplinarios que generen una bioética humanista.
• Capacitación dirigida a los padres, para la adquisición de hábitos saludables de higiene, alimentación, estimulación temprana y otras, durante el embarazo y la crianza de los hijos.
En Lima, a los trece días del mes de Noviembre del año 2005.
PRONUNCIAMIENTO DE LOS JÓVENES
QUE SE ADHIEREN
A LA DECLARACION DE LIMA
Nosotros los jóvenes deseamos ser felices; el mundo nos ofrece un estilo de vida individualista, consumista, sin principios trascendentes, que pone la felicidad en el ansía desordenada de placer y bienes materiales, que nos desorienta e induce al libertinaje. Las consecuencias de todo esto las estamos viendo: desintegración del matrimonio y de la familia, pérdida del respeto por la vida humana, aumento de la violencia, egoísmo y pérdida de os valores auténticos.
Somos conscientes y convencidos que:
• el amor autentico es buscar el bien de la persona amada y no satisfacerse a costa de ella;
• estamos en una etapa de formación y de desarrollo personal en la que necesitamos aprender a ejercer el dominio sobre nosotros mismos;
• vivir en plenitud nuestra juventud, no es comportarnos como si estuviéramos casados sin estarlo;
• concebir un hijo es una gran responsabilidad y un acto de amor generoso.
• el acto sexual da origen de forma natural a una nueva vida, y no tiene sentido más que dentro del matrimonio, en una familia bien constituida.
Por lo que exigimos a las autoridades, responsables de los medios de comunicación y organizaciones de la sociedad civil:
• que la verdad auténtica sobre nuestro desarrollo pleno no sea tergiversada o manipulada por intereses económicos, ideológicos, políticos y sociales;
• que promuevan valores auténticos, éticos y morales;
• que respeten nuestra libertad y nuestro derecho a prepararnos como es debido para el matrimonio;
• que no nos induzcan a tener relaciones sexuales con falsas campañas de “sexo seguro”
Por último, nos comprometemos:
• A respetar y defender la vida humana desde la fecundación hasta su fin natural.
• A formarnos en valores humanos que contemplan, entre otros, el derecho que tiene toda persona, de ser traída al mundo dentro del ámbito de amor, seguridad y responsabilidad que supone el matrimonio, y por ende, la familia bien constituida.
• a poner los medios para lograr una felicidad basada en el verdadero amor - entendido como mutua donación - sin seguir estereotipos falsos que llevan al vacío y a la frustración.
• a poner nuestra sexualidad al servicio del amor auténtico y de la vida.
En Lima, a los trece días del mes de Noviembre del año 2005.
Introducción a la serie sobre “Perdón, la reconciliación y la Justicia Restaurativa” |
San Josemaría, maestro de perdón (1ª parte) |
Aprender a perdonar |
Verdad y libertad |
El Magisterio Pontificio sobre el Rosario y la Carta Apostólica Rosarium Virginis Mariae |
El marco moral y el sentido del amor humano |
¿Qué es la Justicia Restaurativa? |
“Combate, cercanía, misión” (6): «Más grande que tu corazón»: Contrición y reconciliación |
Combate, cercanía, misión (5): «No te soltaré hasta que me bendigas»: la oración contemplativa |
Combate, cercanía, misión (4) «No entristezcáis al Espíritu Santo» La tibieza |
Combate, cercanía, misión (3): Todo es nuestro y todo es de Dios |
Combate, cercanía, misión (2): «Se hace camino al andar» |
Combate, cercanía, misión I: «Elige la Vida» |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía II |
La intervención estatal, la regulación económica y el poder de policía I |