Moncloa asegura que el viaje de la vicepresidenta a la Santa Sede estaba previsto y que en la entrevista no se habló ni de la ley ni de la concentración de mañana
ABC - M. MARÍN, J. V. BOO
MADRID, ROMA. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se entrevistó ayer en el Vaticano durante alrededor de una hora con el secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Angelo Sodano, en vísperas de la manifestación convocada mañana en Madrid por div...
Moncloa asegura que el viaje de la vicepresidenta a la Santa Sede estaba previsto y que en la entrevista no se habló ni de la ley ni de la concentración de mañana
ABC - M. MARÍN, J. V. BOO
MADRID, ROMA. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se entrevistó ayer en el Vaticano durante alrededor de una hora con el secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Angelo Sodano, en vísperas de la manifestación convocada mañana en Madrid por diversas asociaciones católicas y de padres de alumnos contra la Ley Orgánica de Educación que ya tramita el Congreso.
Fuentes oficiales de Moncloa negaron que durante la entrevista, en la que la vicepresidenta también conversó con monseñor Giovanni Lajolo, responsable de la política exterior de El Vaticano, De la Vega y Sodano abordaran los aspectos más polémicos de la Ley de Educación o el llamamiento a esa manifestación, convocada para expresar el frontal rechazo de los colectivos católicos a los recortes que sufrirá la asignatura de Religión en los colegios cuando entre en vigor la nueva ley.
Las fuentes indicaron que la entrevista en El Vaticano, prevista «desde hace tiempo», pero a la que en todo caso el Gobierno ha querido dar un carácter de «discreto», sirvió para repasar las relaciones entre ambos Estados ya que no se había producido ninguna reunión a ese nivel después de la muerte de Juan Pablo II y la designación de Benedicto XVI como nuevo Papa.
Puentear al Episcopado
Sin embargo, otras fuentes socialistas consultadas por ABC sostuvieron que la filosofía de esta visita a El Vaticano era la de puentear a la Conferencia Episcopal y acudir directamente a la cúpula de la Iglesia en vista de que la firmeza demostrada por los obispos españoles imposibilita cualquier consenso. Todo ello, en la confianza de que la Santa Sede medie e inste a la Iglesia española a desbloquear el punto muerto en que se encuentran sus tirantes negociaciones con el Estado, después de que ambas instituciones lograsen un aproximación en torno a la asignatura de religión. Frustrado cualquier principio de acuerdo y preocupado por el impacto de la manifestación de mañana por las calles de Madrid, el Gobierno ha intentado, según estas últimas fuentes, reconducirlo en los últimos días improvisando este viaje al Vaticano.
«La agenda no contenía temas de actualidad, sino de política general», insistieron las fuentes de la Vicepresidencia para contrarrestar las versiones que apuntan a que la visita de Fernández de la Vega se debió a un intento del Gobierno de que el Vaticano influya sobre la Conferencia Episcopal para que flexibilice sus tesis.
En declaraciones a la cadena Cope, el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, confirmó anoche que la reunión en la Secretaria de Estado del Vaticano había sido «pedida insistentemente desde hace unos días por el Gobierno» y que en ella el Ejecutivo español había expuesto su disposición al diálogo. Martínez Camino añadió que la Santa Sede, en ese encuentro de veinte minutos de duración, recordó a la vicepresidenta primera que el interlocutor del Gobierno es la Conferencia Episcopal. «El Estado tienen acuerdos suscritos con la Santa Sede. Y el Gobierno está en su pleno derecho de mantener esta relación directa, pero el Ejecutivo sabe que la Santa Sede delega estas facultades a las Conferencia Episcopales respectivas».
Juan Antonio Martínez Camino reiteró que la LOE «no establece un estatuto digno para la asignatura de la religión y se preguntó por qué un Gobierno democrático tiene tantas dificultes para que la solicitud del 80 por ciento de los padres, que piden que sus hijos aprendan religión en el ámbito escolar, no pueda ser debidamente correspondida.
«Puerta trasera»
La reserva absoluta en torno a este viaje, aparentemente desconocido de antemano por la embajada de España ante la Santa Sede, contrasta con la práctica habitual, ya que las visitas de ministros de Gobiernos anteriores al Vaticano se anunciaban con antelación y solían incluir una conferencia de prensa. La visita de María Teresa Fernández de la Vega se produjo a petición del Gobierno español, y el Vaticano acepta no dar publicidad cuando los dignatarios visitantes así lo requieren. Aunque en general gusta poco, la «puerta trasera» puede ser útil en algunas circunstancias. En casos como el de ayer, el Vaticano califica el encuentro como «privado» y no proporciona información alguna sobre los temas abordados.
En sus declaraciones efectuadas anoche a la cadena Cope, Juan Antonio Martínez Camino señaló que el Vaticano no había difundido la celebración de este encuentro, sino que habían sido medios diplomáticos próximos al Gobierno quienes había roto la discreción de este encuentro.
http://www.abc.es/abc/pg051111/prensa/noticias/Sociedad/Educacion/200511/11/NAC-SOC-118.asp