Jóvenes y mayores. En esta ocasión, Allen se retrotrae a los años cuarenta para meterse en la piel de C. W. Briggs, un detective con más fortuna que olfato, pero que por azares de la vida es capaz de encontrar hasta un Picasso oculto en un telescopio. El personaje en cuestión es misógino, solitario y con incontinencia verbal (no podría ser de otra manera). Su futuro parece pender de un hilo, pues ha llegado a la empresa Betty Ann Fitzgerald (Helen Hunt) con la intención de optimizar medios, reestructurar la plantilla (si es necesario) y, en definitiva, recortar gastos. Algo inferior a "Granujas de medio pelo" y reclamando quizá algo más de hilaridad, "la maldición de Escorpión Jade" es superior a la media de lo que se estrena por su excelente confección. Un guión clásico y chispeante refleja bien la típica lucha entre parejas que no se pueden ver y que en el fondo se aman con pasión. Fiel a su cita anual, Allen rinde homenaje a cierto tipo de cine muy corriente en los años 40 y que él degustaba con fruición. Las interpretaciones de todo el reparto son estupendas, y brillan igualmente Woody Allen y Helen Hunt como Charlize Theron y Dan Aykroyd . La película no pasará a la historia entre las mejores del cineasta pero los amantes de su cine y cuantos deseen ver una comedia romántica, bien elaborada, al estilo clásico, rebosante de ingenio y no exenta de intriga, no quedarán defraudados. Su tono ácido, la inmoralidad en que se mueven sus personajes, las recurrentes bromas sexuales y una desagradable invectiva contra la religión, pueden ser elementos a tener en cuenta para valorar el público adecuado. Algunos comentarios provocativos y dos escenas que parece que podrían tener inconvenientes (cuando la chica con gabardina va a la casa de Woody Allen y una escena de sofá cuando Allen va a la casa de su compañera de trabajo) sin mayores consecuencias. Para más información, http://www.aceprensa.com/peliculas/106105527.htm