Un grupo de muchachos afectados de ‘trisomía 21' atienden y administran el italiano ‘Albergo Etico’, un hotel de tres estrellas con 26 habitaciones y 60 camas
Cada vez hay más razones para acabar con el debate en torno al aborto eugenésico, que con el argumento de la malformación del feto es una forma de discriminación hacia las personas con discapacidad que busca eliminar, entre otras, a aquellas afectadas por el síndrome de Down.
Un buen ejemplo lo tenemos en la iniciativa del hotel Albergo Etico, atendido y administrado solo por jóvenes afectados de trisomía 21, que se han lanzado a esta aventura con la seguridad de quien se sabe capacitado para este tipo de actividades. El Albergo Etico se encuentra en el corazón de la provincia italiana de Asti.
La idea de abrir un lugar que fuera solamente conducido por personas con síndrome de Down surgió de la visión de amigos y profesionales agrupados en la Associazione Albergo Etico que, desde el año 2006, fomenta la inserción laboral de estos muchachos que tienen mucho que ofrecer, según informa Aciprensa.
El hotel de tres estrellas fue inaugurado el 18 de junio y dentro de un año espera convertirse en uno de cuatro. Está ubicado en el corazón de la ciudad, cerca del Parque della Resistenza, un hermoso jardín lleno de árboles junto a la histórica Piazza Alfieri.
Ayudar a la autonomía personal
El Albergo Etico tiene 26 habitaciones y 60 camas, un restaurante que funciona en una bodega histórica con capacidad para 50 personas, un jardín, aire acondicionado, conexión inalámbrica de internet y una zona de trabajo.
Según el diario italiano La Repubblica, además de la posibilidad de adquirir experiencia en el lugar de trabajo, los jóvenes que trabajan en el hotel tienen un espacio en el que aprenden a vivir solos, gestionan ellos mismos su sueldo y aprenden a trabajar en grupo.
"La intención es formar a nuevos profesionales en el sector turístico de toda Italia, ayudándoles en la adquisición de la autonomía personal, paso indispensable para las personas con discapacidad de cara al mundo del trabajo", señala el diario.
El proyecto del Albergo Etico gira en torno a Nicolás, un niño con síndrome de Down que hizo, hace unos años, una pasantía en el restaurante Tacabanda, de Asti, conectado con el hotel.
La experiencia de Nicolás, además de haber cambiado su vida, cambió la vida de muchos de sus compañeros de la cercana Casa Montessori, un hogar para muchachos con síndrome de Down.