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Salvoconducto

Salvoconducto

  • Valoración moral: Con inconvenientes
  • Año: 2003
  • Dirección: Bertrand Tavernier
Bertrand TavernierGuión: Jean Cosmos y Bertrand Tavernier. Intérpretes: Jacques Gamblin, Denis Podalydès, Marie Gillain, Charlotte Cady, Marie Desgranges. 170 min. V. Jóvenes. En la Francia ocupada, la productora alemana Continental Films produce películas desde 1940; de modo que es un reflejo del dilema al que se enfrentan todos los franceses: ¿Es legítimo seguir trabajando como si no hubiese cambiado nada, “entre los dientes del lobo, donde no te puede morder”? ¿O hay que negarse a colaborar y abandonar el país? Bertrand Tavernier ha bebido de las memorias de dos cineastas franceses que adoptaron posturas distintas. Jean Devaivre –un fantástico Jacques Gamblin, premiado en Berlín 2002–, ayudante de dirección, se incorpora a la Continental mientras es miembro activo de la Resistencia. El otro, Jean Aurenche (Denis Podalydès), es un bohemio guionista con alma de poeta que lucha por rechazar las ofertas de trabajo de los alemanes. La calidad técnica y artística de Tavernier vuelve a rayar la perfección, con secuencias –el bombardeo del Maternal, el accidentado vuelo a Inglaterra, los rodajes...– de un poderío narrativo que el cine norteamericano logra muy de tarde en tarde. También es excepcional el diseño de producción. Sin embargo, ha optado por un metraje desmesurado que se revuelve contra la solidez de una película que debía haber sido más sintética. Con todo, hay que rendirse ante la maestría del director de Hoy empieza todo, su obra más acabada. El reparto brilla a gran altura, gracias a los vivísimos diálogos escrito por Jean Cosmos, que escapan siempre de la vulgaridad o la sensiblería. La película ha dividido a la crítica francesa, como ya ocurrió con La inglesa y el duque, de Eric Rohmer. Un sector no le ha perdonado a Tavernier su voluntad de rodar sin prejuicios ideológicos; el otro, se lo ha agradecido. 5': escena sensual de alcoba que se reproduce brevemente dos minutos más tarde. Se pueden suprimir las dos sin dañar la narración.