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. Dirección: Kimberly Peirce. País: USA. Año: 2013. Duración: 100 min. Género: Terror. Interpretación: Chloë Grace Moretz (Carrie White), Julianne Moore (Margaret White), Gabriella Wilde (Sue), Portia Doubleday (Chris Hargensen), Judy Greer (Srta. Dejardin), Alex Russell (Billy Nolan), Gabriella Wilde (Sue Snell), Ansel Elgort (Tommy). Guion: Lawrence D. Cohen y Roberto Aguirre-Sacasa; basado en la novela de Stephen King. Producción: Kevin Misher. Música: Marco Beltrami. Fotografía: Steve Yedlin. Montaje: Lee Percy y Nancy Richardson. Dirección artística: Carol Spier. Vestuario: Luis Sequeira. Distribuidora: Sony Pictures Releasing de España. Estreno en USA: 18 Octubre 2013. Estreno en España: 5 Diciembre 2013.
Reseña:
Poderes psíquicos
Remake de Carrie (1976). Carrie White, marginada por culpa de su madre, esquizofrénica obsesionada con la religión, se convierte en objeto de las burlas de sus compañeros de instituto tras el sobresalto que se lleva al no esperar su primera menstruación. Junto a los cambios hormonales, a Carrie le llegan también peligrosos poderes telequinéticos.
Al frente de Carrie está nada menos que Kimberly Peirce, que tras la interesante Boy's Don't Cry apenas se ha prodigado, pues únicamente ha entregado un episodio de la serie L., y el film Stop-Loss. El toque de la realizadora –homosexual militante– está presente en que el desequilibrio de la madre de la protagonista, detonante del conflicto, parece deberse sobre todo a su frustrada sexualidad y a su lesbianismo reprimido.
Además de hablar de la desorientación moral, la Carrie de Peirce actualiza del original su retrato de los adolescentes conflictivos, cuya situación parece haber empeorado en los últimos años. Así, cuelgan vídeos humillantes en YouTube, a la mínima el padre de la criatura amenaza a la profesora que trata de solucionar problemas con una denuncia, etc.
Por lo demás, a pesar de lo innecesario de la propuesta, las protagonistas realizan un gran trabajo, sobre todo Julianne Moore, que compone una madre tan escalofriante como la de Piper Laurie. Por su parte, Chloë Grace Moretz logra una hazaña no menos importante: hacer olvidar el error de casting de que, con su atractivo, no parece ni mucho menos la "rarita" de la clase, como lo fue Sissy Spacek. (Decine 21 / Almudí JD) LEER MÁS