Madrid, 23 de mayo de 2005
La prensa del pasado sábado, día 21, recogía de manera destacada una fotografía que ha causado indignación a muchos creyentes y no creyentes en España y en todo el mundo. El Presidente de la Generalidad de Cataluña, D. Pascual Maragall y el Presidente del Partido Esquerra Republicana de Cataluña, D. José Luis Carod-Rovira, junto con otras personas que les acompañaban, se mostraban utilizando un símbolo de la pasión de Nuestro Señor Jesucristo, la corona de esp...
Madrid, 23 de mayo de 2005
La prensa del pasado sábado, día 21, recogía de manera destacada una fotografía que ha causado indignación a muchos creyentes y no creyentes en España y en todo el mundo. El Presidente de la Generalidad de Cataluña, D. Pascual Maragall y el Presidente del Partido Esquerra Republicana de Cataluña, D. José Luis Carod-Rovira, junto con otras personas que les acompañaban, se mostraban utilizando un símbolo de la pasión de Nuestro Señor Jesucristo, la corona de espinas, como objeto de bromas y de risas. El lugar de estos hechos era la ciudad santa de Jerusalén y el contexto de los mismos, un viaje institucional a Israel y Palestina.
Las personas verdaderamente sensibles a la libertad religiosa y a los sentimientos de los creyentes respetan los lugares y los símbolos religiosos y se abstienen de mofarse de ellos y de herir de este modo a quienes los reverencian. La mayor parte de los obispos españoles, reunidos ayer domingo en Zaragoza, procedentes de todas las Comunidades Autónomas, que habían tenido conocimiento de los hechos aludidos, han expresado su hondo malestar y su disgusto ante un comportamiento impropio de ciudadanos respetuosos y menos aún, si cabe, de quienes en virtud de sus responsabilidades políticas habrían de mostrar exquisito respeto a los derechos fundamentales de aquéllos a quienes representan.
Hacemos constar, pues, nuestra enérgica protesta por unos hechos lamentables que, por haber acontecido en un lugar tan querido y tan visible para toda la Cristiandad, han afectado en cierto modo a toda la Iglesia y han dejado mal el nombre de nuestro pueblo en todo el mundo.
http://www.conferenciaepiscopal.es/actividades/2005/mayo_23.htm#up