almudi.org Torturado hasta la muerte por profesar su fe
La Razón 1.9.04
Javed Anjum se convirtió en un nuevo mártir de la Iglesia
el pasado mes de abril. Fue secuestrado y torturado hasta la muerte durante
cinco días para lograr su conversión al islam. Este estudiante de economía se
detuvo en Toba Tek Singh, en Paquistán, para beber agua. Fue entonces cuando un
profesor y algunos estudiantes de una escuela coránica cercana lo secuestraron.
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almudi.org Torturado hasta la muerte por profesar su fe
La Razón 1.9.04
Javed Anjum se convirtió en un nuevo mártir de la Iglesia
el pasado mes de abril. Fue secuestrado y torturado hasta la muerte durante
cinco días para lograr su conversión al islam. Este estudiante de economía se
detuvo en Toba Tek Singh, en Paquistán, para beber agua. Fue entonces cuando un
profesor y algunos estudiantes de una escuela coránica cercana lo secuestraron.
Según Joseph Coutts, obispo de Faisalabad, «sus verdugos
quisieron obligarlo a recitar el credo musulmán, suficiente para convertir a
alguien oficialmente en musulmán. Pero él no quiso». Su cuerpo quedó tan
demacrado que sus captores decidieron entregarlo a la Policía con la excusa de
que Javed había intentado robarles. Allí, el joven permaneció dos largos días en
el calabozo hasta que un médico pudo atenderle. Pero ya era demasiado tarde y
sus heridas eran irreversibles.
La intolerancia hace hoy de Pakistan un lugar en el que
los cristianos vuelven a sufrir las persecuciones de la antigua Roma. Este país
se encuentra hoy entre dos mundos: uno, el del integrismo islámico, y otro, el
que pretende su presidente. Pervez Musharraf es acorralado a menudo en el
Parlamento por los islamistas radicales cuando cuestiona las normas inspiradas
en la ley coránica. Su interés en convertir Paquistán en un país moderno y en
diálogo con Occidente choca con los más de 140 millones de musulmanes, lo que
equivale al 99 por ciento de la población.
Actualmente en Paquistán, como dice el obispo de
Faisalabad, hay un nuevo mártir, «la gran fe de Javed y su sangre, como la de
todos los mártires, nos hará más fuertes». El por qué la Policía jamás inició
investigaciones sobre los incidentes que provocaron la muerte de este joven es
una cuestión que quedará, a buen seguro, sin resolver.