Valencia.- La Conselleria de Sanidad, a través de las direcciones de los hospitales, ha comenzado a “obligar” a los médicos interinos a que realicen los abortos porque los galenos con plaza se niegan a hacer las interrupciones voluntarias de embarazo (IVE).
Como es lógico, los directores de los centros hospitalarios “han echado mano de los facultativos que tienen contratos en precario porque, ante su inseguridad laboral, no pueden ofrecer una negativa como respuesta a la hora de realizar los abortos”, según denunciaron a El Mundo fuentes sindicales.
En el Hospital La Fe, el director del pabellón Materno-infantil, y el jefe del servicio de obstetricia en funciones, han convocado, durante los últimos días, al personal que hace guardias de presencia física con el objeto de conocer qué facultativos son objetores de conciencia para organizar la programación de los abortos.
Según denuncian las mismas fuentes sindicales, “estos profesionales no fueron avisados exactamente de lo que se les iba a preguntar, y mucho menos que tendrían que firmar un documento del que había varios modelos en función de su grado de rechazo al aborto”.
Por este motivo, los facultativos se han enfrentado a cuatro modelos de documentos diferentes que van desde: “soy objetor en todos los casos”, “no soy objetor para el primer trimestre de gestación”, “no soy objetor para el segundo trimestre”, y por último, “no soy objetor en ningún caso”.
Se da la circunstancia de que alrededor de 30 personas que realizan las guardias de presencia física, apenas tres son personal fijo de plantilla con contrato de La Fe. El resto son interinos, médicos con contratos a tiempo parcial (para guardias), o personal con contrato en otros centros que tienen un permiso especial para realizar dichas guardias (todos ellos también son interinos), “de lo que se traduce que son fácilmente presionables, ya que su puesto de trabajo está en el aire”, manifestaron los responsables de los sindicatos.
El Mundo, jueves 25 de septiembre de 2003